La lucha contra el cambio climático es el reto medioambiental más importante de la humanidad. Por eso, como parte de Beiersdorf, nuestra empresa matriz, Liposan persigue unos ambiciosos objetivos climáticos en consonancia con la ciencia climática más reciente. No sólo nos preocupamos por alcanzar una reducción significativa de las emisiones de CO₂e en nuestros centros de producción, sino que también trabajamos para reducir las emisiones indirectas en toda nuestra cadena de suministro, como los ingredientes y los materiales de envasado que utilizamos para nuestros productos Liposan.

Para más información https://www.beiersdorf.com/sustainability/environment/climate-caring-future

¿Qué es el CO₂e? El dióxido de carbono equivalente o CO₂e es una unidad estándar para medir la huella de carbono y expresa el impacto de los gases de efecto invernadero (como el metano, el óxido nitroso, etc.) en términos de la cantidad de CO₂ que generaría el mismo calentamiento global. El CO₂e se utiliza para medir y notificar las emisiones. 

El primer paso para desarrollar bálsamos labiales más respetuosos con el clima es comprender cuáles son las principales fuentes de emisión de CO₂e. A partir de ahí, definimos medidas concretas para reducir la huella de CO₂e de nuestros productos. Por ejemplo, nos esforzamos en reducir el uso de plástico virgen de origen fósil en nuestros envases y en utilizar ingredientes naturales y de fuentes renovables en nuestras fórmulas.

¿Qué son los plásticos vírgenes de origen fósil? ¿Por qué debemos reducir su consumo? Los plásticos vírgenes de origen fósil son polímeros producidos a partir de materias primas petroquímicas, como el gas natural o el petróleo crudo, que nunca se han utilizado o procesado. El proceso de extraer y transportar estos combustibles para luego fabricar artículos de plástico virgen genera miles de millones de toneladas de gases de efecto invernadero y, cuando los residuos plásticos no se gestionan bien, contaminan el medio ambiente. Al utilizar plásticos reciclados, damos a estos materiales una vida más larga y nos aseguramos de mantenerlos en el bucle de la economía circular.

Reducimos significativamente las emisiones de CO₂e de nuestros productos optimizando nuestras fórmulas, envases y procesos de la cadena de suministro, pero también somos conscientes de las emisiones restantes: además de reducir la huella de CO₂e, Liposan equilibra las emisiones restantes de sus productos a través de proyectos climáticos certificados, haciendo que el impacto climático de sus productos esté 100% neutralizado.

¿Por qué son productos “climáticamente neutralizados" y no "climáticamente neutros"? Queremos ser honestos y transparentes, por eso no utilizamos el término "climáticamente neutro". En su lugar utilizamos "impacto climático neutralizado", para evitar que pienses que nuestros productos están completamente libres de emisiones.

En cuanto a los proyectos climáticos certificados, sólo invertimos en proyectos que favorecen la absorción natural de CO₂, por ejemplo mediante la forestación. Para garantizar que nuestro impacto positivo es real, medible y permanente, trabajamos con organizaciones expertas y verificaciones de terceros que siguen normativas internacionales, como el Verified Carbon Standard (VCS) y el Gold Standard.

El carbono no sólo se almacena en los bosques de todo el mundo, sino también en los suelos sanos, que absorben el agua y se convierten en la base de una vegetación próspera y en el hábitat de innumerables especies. Sin embargo, este equilibrio natural se ve alterado cuando la tierra se utiliza de forma continua y sin restricciones para el pastoreo de ganado. En este aspecto se centra nuestro proyecto climático repartido en 2 millones de hectáreas en el norte de Kenia. Al establecer prácticas de pastoreo más sostenibles, el suelo tiene tiempo de recuperarse y se mantiene sano. Es un pequeño cambio con efectos significativos para la protección del clima y el bienestar de las comunidades locales: al almacenar más carbono en el suelo, la tierra también puede almacenar más agua durante los periodos secos, lo que a su vez ayudará a las comunidades locales a hacer frente a los efectos del cambio climático y la sequía.

Desde el punto de vista de la biodiversidad, la mejora de las praderas y de la calidad de los pastos también traerá salud al ganado y a los ecosistemas, así como a los hábitats de la fauna local, que incluye cuatro especies endémicas en peligro de extinción: el rinoceronte negro oriental, la cebra de Grévy, la jirafa reticulada y el Órix Beisa.

En cuanto a los medios de subsistencia de las comunidades locales, la financiación de este proyecto ayudará a diversificar los ingresos de la comunidad, empleando personal, comprando suministros y apoyando necesidades específicas de las zonas de conservación en las que se implementa, como proyectos de agua potable, educación e infraestructuras: residencias escolares, viviendas para profesores, infraestructuras hídricas y construcción y mantenimiento de instalaciones sanitarias.

Más información en https://www.firstclimate.com/?lang=en